#MetaDatos | En la campaña presidencial de 2018, las cosas cambiaron radicalmente para quienes operan las granjas de bots. Twitter y Facebook endurecieron sus políticas para inhibir a esas cuentas robotizadas que, en este caso, trataron de incidir en el debate político en las redes sociales.
Javier Murillo Acuña, director de la agencia Metrics, describe en entrevista con SinEmbargo que para las agencias dedicadas a crear cuentas autómatas con determinados objetivos la situación se complicó, pero “los peces más gordos” incurrieron en nuevas formas de operación. Así, en esta campaña, el fenómeno se volvió más amplio, sofisticado y complicado de detectar.
Este viernes, en plena veda electoral dictada por el INE, se orquestó, con dos tendencias distintas, un ataque en Twitter contra los candidatos presidenciales Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya Cortés, con la clara intención de dañar su imagen.
Ciudad de México, 29 de junio (SinEmbargo).– En plena veda dictada por el Instituto Nacional Electoral (INE), y a sólo unas horas de la elección federal del 1 de julio, dos tendencias se posicionaron en Twitter para atacar a los candidatos Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya Cortés con la intención de dañar su imagen.
Con los hashtags #AnayaYaPerdio y #amLOVEnezuela miles de bots difundieron contenidos nocivos para hacer ruido a las candidaturas del panista y del morenista, en cada caso.
Ambas tendencias reunieron en conjunto un alcance de 108 mil 366 cuentas y fueron generados por dos grupos de usuarios. La tendencia #amLOVEnezuela surgió después de que varios líderes de izquierda, entre ellos Cristina Kirchner, ex Presidenta de Argentina, y el político español Pablo Iglesias, secretario general de Podemos, publicaron mensajes a favor de AMLO.
Entre los usuarios que atacaron al tabasqueño se detectaron cuentas con aspecto automatizado que compartieron postales en las que se personificó al candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia” con la vestimenta del ex Presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías.
Las cuentas que participaron en la tendencia en contra de Ricardo Anaya se caracterizaron por haber tuiteado en ocasiones anteriores contenido a favor del priista Miguel Castro Reynoso, quien compite por la gubernatura en Jalisco. Entre estos usuarios se encontraron cuentas como @Liisboaalicia, @n0rmabstmg y otras más.
La tendencia #AnayaYaPerdio se caracterizó por la difusión de un video en el que observa a Ricardo Anaya en compañía de su esposa y un grupo de panistas, y donde agradece el apoyo del PAN y afirma que a diferencia de ellos hay “un grupo de gente que no tiene los principios del partido”.
A mi si me da meyo que esto se cumpla #amLOVEnezuela ? pic.twitter.com/6Rjn6BQVem
— Alex Frias (@alexfriass) 29 de junio de 2018
El endurecimiento de las políticas para frenar la actividad de bots con fines maliciosos –tanto en Twitter como en Facebook– le hizo más difícil el trabajo a las agencias que operan con miles de teléfonos celulares para manipular bots, expuso en entrevista Javier Murillo Acuña, director de la agencia Metrics.
El especialista en incidencia en redes a través de la inteligencia artificial advierte que “los peces más gordos” lograron encontrar maneras para continuar con estas estrategias al recurrir a cambios en su organización. Asimismo, las operaciones con menor cantidad de cuentas se diversificaron y se volvieron más sofisticadas.
De acuerdo con Murillo Acuña, en este periodo de campaña fue más difícil que los bots operaran con la libertad que lo hicieron en otras campañas electorales, pero la restricción tuvo un revés interesante al permitir a cualquier agencia o persona con conocimientos en Tweet Deck poner en operación granjas de bots, lo que diversificó el fenómeno.
Varios factores permitieran que esta actividad se intensificara. A nivel nacional, la laxitud del marco legal mexicano para sancionar a los responsables del manejo de cuentas automatizadas con el objetivo de manipular la opinión pública. Y a nivel global, la falta de interés que manifiesta Google para impedir que se empleen cuentas de Gmail en la generación de bots. Según indicó Murillo, la falta de acciones de Google impide que las iniciativas de Twitter y Facebook tengan un alcance mayor.
El interés de ambas rede sociales por eliminar a los bots se generó tras revelarse el supuesto empleo de este tipo de cuentas por parte del Gobierno ruso para incidir en los resultados de las elecciones presidenciales de EU durante el 2016. Colin Codwell, vicepresidente de Políticas Públicas de Twitter afirmó durante su visita a México en febrero de este año, que la red social ha intensificado sus esfuerzos por identificar y bloquear miles de cuentas maliciosas que operan a través del software Tweet Deck. El resultado fue la remoción de 6.4 millones de perfiles apócrifos por semana, el 70 por ciento han sido bloqueados antes de que realicen el primer tuit.
EL COLONIZAJE BOT
El monitoreo realizado por Metrics arrojó que en esta elección operaron cientos de granjas de bots que a diferencia del 2012, no se enfocaron en un solo objetivo. El especialista señaló que en esta elección los fines de los bots fueron muy diversos. Las granjas que realizaron ataques no fueron las mismas que buscaron proteger la imagen de ciertos candidatos, o que buscaron posicionarlos a ellos o sus partidos, tampoco fueron las mismas que aumentaron el número de seguidores de una cuenta, entre otros fines. Su procedencia no fue solo nacional, ni tampoco se limitó a una sola red social.
Si bien, Twitter es el espacio con mayor reconocimiento de esta práctica, en estas elecciones los bots también influyeron en Facebook y otras redes sociales. De acuerdo con el director de Metrics, las cuentas automatizadas se emplearon en la red social de Mark Zuckerberg para incrementar la participación en las encuestas que se realizaron en varias páginas. Llamó la atención del especialista que en este caso en particular, Metrics identificó que la mayoría de los bots se crearon en la India. A esta práctica se sumaron muchas más.
En YouTube, las estrategias de los bots fueron otras. En esa plataforma se buscó generar relevancia dentro del algoritmo para que determinados videos se posicionaran entre los más populares en las listas de sugerencias de los usuarios. Murillo considera que esta práctica fue la responsable de que en algunas cuentas se generaran miles de vistas en un solo video –comportamiento que el experto asegura no procede sólo del pago de pautas–, mientras que el resto de los contenidos permaneció con audiencias bajas.
Javier Murillo agregó que durante este periodo electoral, los bots tuvieron una sofisticación importante, y resulta complejo identificar la procedencia de estos, ya que no solo se generan dentro de agencias, sino que los propios estrategas de los partidos políticos podrían estar operando algunos de ellos o contratar intermediarios.
ORGANIZACIÓN FALLIDA
A unas semanas de que diera inicio el periodo oficial de campaña, Colin Codwell aceptó la existencia de grupos de bots que con el fin de posicionar el nombre de un candidato generan tendencias en Twitter a través de la coordinación de miles de tuits entre un grupo de cuentas
Codwell consideró que este tipo de prácticas revelan una organización sofisticada en el interior de clusters liderados por partidos políticos, pero que no logran incidir en la conversación en Twitter. Al término de las campañas, Javier Murillo coincide con el alto ejecutivo al señalar que la influencia obtenida por los bots, no logró cambiar la opinión sobre determinados candidatos, y su efecto manipulatorio fue bajo entre usuarios que ya estaban definidos por una opción.
Sin embargo, el especialista argumenta que los bots si tuvieron éxito en polarizar la opinión en el sector de usuarios que no definieron su voto entre los candidatos que ocuparon las tres últimas posiciones. Mientras que los seguidores de Andrés Manuel López Obrador mantuvieron firme su apoyo, los bots si lograron sembrar dudas entre los usuarios anti-AMLO. Ricardo Anaya Cortés y José Antonio Meade se mantuvieron en redes sociales en un empate técnico y un grupo de seguidores no pudo definir a cuál de los dos dar su apoyo.
BOTS A LA MEXICANA
La sofisticación de los bots en la contienda electoral estuvo influenciada por prácticas que se crearon en el extranjero. Sin embargo, entre todo el caos, un grupo de cuentas automatizadas trascendió por ser iniciativa exclusiva del contexto mexicano. De acuerdo con Murillo, los chat bots que operaron en las llamadas para inhibir el voto a favor de López Obrador tuvieron características vistas por primera vez en México. No se tiene información de que las llamadas generadas por agencias privadas, ya sancionadas por el Instituto Nacional Electoral (INE), se utilizaran en otras elecciones. Estos chat bots podrían ser innovación mexicana y su influencia trascendió a la plataforma empleada.
El pasado 22 de abril, la Unidad de Datos de SinEmbargo publicó sobre el ejercicio de 8 millones de cuentas de bots y trolls que al inicio de las campañas tuvieron presencia en siete redes sociales. Estas cuentas tienen una particularidad: su tránsito por un terreno medio, en el que en ocasiones actúan como cuentas automatizadas y en otras como personas de carne y hueso.
Este perfil de usuario hace difícil su detección por los métodos de vigilancia de Twitter y Facebook, pero requiere de un esfuerzo mayor de los creadores para generarlas y mantenerlas activas. Su existencia fue identificada en el estudio de la Universidad de Oxford titulado «Troops, Trolls and Troublemakers: A Gloval Inventory of Organized Social Media Manipulation». De acuerdo con esta investigación, el Gobierno federal empleó este tipo de cuentas –a los que durante el sexenio de Enrique Peña Nieto se les conoció como “peñabots”– y lo hizo con fines manipulatorios. Tras la publicación del estudio, la Coordinación de Estrategia Digital Nacional negó la existencia y empleo de estas cuentas.